La esencia de la Vida tiene un inicio intangible, astral, con un sentido definido hacia metas útiles y beneficiosas, basadas en la integridad humana de principios inalienables de rectitud y veracidad. Cultivando en el tiempo: paciencia y sabiduría con sentimientos profundos, nobles y sinceros que integran normalmente a la mayoría de las personas. Sobre todo: aprender a presentar pausadamente, los sentimientos bellos que se tienen en el alma y se acrecientan con el transcurrir de la edad: gratitud, verdad, afecto y sobre todo el Amor que facilita la interrelación, la comprensión y paz interior, cuando se siente y se entrega con verdad oportunamente. Así se va estructurando el ser humano individualmente, que incorporado a la sociedad, hace brotar espontáneamente emociones y apreciaciones hacia los semejantes que le rodean, creando vínculos de amistad, conocimiento y respeto. Surgen en cualquier momento relaciones emocionales de afecto y cariño, al inaugurar la Amistad y Camaradería entre conocidos en el tiempo e identificados entre sí.
Existe desde siempre un grande y noble sentimiento humano, profundamente arraigado en cada corazón: Sentir, dar y recibir Amor. Es el efecto de una íntima sensación que surge más allá del espíritu propio, pues es la fusión dulce y satisfactoria del alma y la materia, una bella consolidación espiritual. Entregar la pureza del Amor: es conquistar la dicha y, recibirlo es motivar la ternura y el apego entre personas. Viviendo el Amor límpido y verdadero, se crea un vínculo espiritual más fuerte que el lazo de la sangre; que une a dos personas en la comprensión cariñosa e inquebrantable, no requiere presentación ostentosa ni lujosa; pues es un profundo sentir interior claro y sencillo, basado en la hermosa candidez desnuda y simple de un emotivo sentimiento profundo: el Amor. Amar es descubrir la luminosidad que nace en el espíritu; verdadera luz que viene del infinito e inspira en las personas múltiples sentimientos de confianza, alegría, paciencia y comprensión. El Amor tiene consistencia profunda, que se consolida paulatinamente en la pareja: raíces fuertes e insondables de seguridad y tranquilidad en mente y corazón, generando así un espacio único de paz y realización individual y familiar. Amor es el emotivo sentimiento sincero de atracción y cariño, de afecto y cercanía a una persona, para quien se anhela todo lo bueno y mejor; igualmente para el prójimo que permanece cercano a uno en diversas circunstancias y caminos. El Amor despierta un intenso acercamiento entusiasta que guía a compartir la vida en común, despierta afinidad completa y armonía de pensamientos, ilusiones y aspiraciones vivenciales. Motivación vital de fraternidad.
En la Palabra Amor; por su significado emotivo puede y debe ofrendar al mundo respeto y paz, con cosechas de una mejor sociedad de acatamiento y aprecio mutuos. Ineludiblemente siembra sensibilidad y paciencia, de la forma más simple y verdadera en otro ser vivo. Tiene un efecto profundo y verdadero, que al ser correspondido imparte generosamente emociones y sentimientos cálidos y perfectos, que acercan la bondad para quien recibe y cosecha en reciprocidad: comprensión y gratitud.El mundo y sus habitantes está actualmente digitalizado, las emociones y sentimientos reales están archivados. Dependiendo casi totalmente de la informática y sus beneficios, que hurtan paulatinamente: sensibilidad, afecto, comprensión, sentimientos compartidos, seguridad. Es adelanto indiscutible de la humanidad. Repartiendo eso sí: rápidamente otras emociones creadas, diferentes e irreales. Eliminando el contacto de reconocimiento entusiasta y auténtico entre humanos, familia, amigos, hermanos, vecinos. Se ignora el Respeto, la Solidaridad y Amistad emocionalmente pura, sin embargo, ante todo palpitan personalmente en verdad: afectos; gestos y acciones fundamentales tan vitales como: Dar y Sentir la belleza y dulzura del Amor Humano.
Gitana del Viento
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