Experiencia es la magna lección adquirida: en el transcurso de cada vida, que nos ayuda a analizar y corregir: nuestras acciones y reacciones. Realmente la Experiencia, es la enseñanza del tiempo que transcurre, en cada maduración como persona, es decir: la edad de cada uno/a, trae el aporte valioso, de las preciosas lecciones de la Experiencia.
Entonces: la Experiencia; son las clases atendidas y aprendidas, en el recorrido vital y personal e individual, en verdad: la edad es la que da la Experiencia ayudándonos a hacer decisiones acertadas. Usualmente: son lecciones que se aprenden en familia, con los amigos/as, lectura, trabajo…siempre con el pasar del tiempo.
En realidad: es la edad la que aporta experiencia, porque aquilata: conocimientos, experiencias, lecciones; brindando un panorama amplio a cada circunstancia o desafío; ya que todo pensamiento y actitudes; se van formado caminando cada vida, con nuevos aprendizajes y lecciones, ampliando así el conocimiento innovador. Todo pensamiento y actitudes creativas, van dando forma a la Madurez Personal.
Al parecer la experiencia no es fácil e inmediata de adquirir, requiere un amplio espacio de tiempo, ya que necesita lecciones Auténticas de Vida; que brindan práctica útil y también paciencia, para afrontar contrariedades, tropiezos; cultivando: capacidad analítica de acontecimientos pasados, adaptándolas al presente; con conciencia y sabiduría, para hacer lo correcto.
La experiencia se estructura viviendo y aprendiendo, las personas no solo asimilamos de impulsos directos, sino que estamos capacitados para analizar: eventos, información, sucesos; para generar alternativas oportunas a lo que se necesite. La experiencia ayuda siempre a valorar la realidad concreta, lo que ofrece la oportunidad de tomar decisiones a tiempo y apropiadamente.
La Experiencia ayuda siempre: a captar la realidad exacta, que nos conduce a tomar mejores decisiones, ser más justos, controlar los impulsos. Vivir la vida con buen sentido y esfuerzo, aprendiendo así a tener una percepción más concreta, de la realidad que guiará siempre: a tomar acertadas decisiones, ser más justos y oportunos; se debe luego: medir y controlar nuestros impulsos. Para adquirir experiencia se impone: analizar las decisiones pasadas en el justo valor, y planificar sinceramente las decisiones futuras; reconocer que se impone en cada vida: aprender de los demás. Afrontar sinceramente las consecuencias, de nuestros actos sin pretextos. Aprender y aplicar la comprensión para los demás, Escuchar con atención y paciencia los argumentos de todas las demás personas presentes.
La Experiencia de cada vida: proporciona una valiosa Personalidad consciente, que no solo significa: exclusivamente el pasar del tiempo con su carga de años, es necesario y útil tomar conciencia, reflexionar, pensar acerca de lo que ocurre alrededor nuestro; para tener un criterio adecuado y único de nuestras propias Vivencias, en el tiempo oportuno, ocupando y utilizando: la Experiencia de la Vida Propia.
Gitana del Viento
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